Thursday the 21st - © I.E.S. Puerto del Carmen - Hostgator Coupon

Con el inicio del curso se hace necesario la elección en cada grupo de un ecodelegado/a, cuya principal labor es el correcto mantenimiento del “Rincón de reciclaje”. Este consiste en tres contenedores, uno amarillo para la separación de envases, otro azul para papel y una garrafa donde se acumulan las tapas de plástico con fines benéficos.

 

El ecodelegado/a se asegura de que lo residuos se separan adecuadamente, de forma que en cada contenedor haya lo que corresponde, pudiendo llamar la atención a sus compañeros cuando perciba un mal uso de los mismos.

 

Los ecodelegados/as se reúnen, además regularmente con el profesor coordinador del Proyecto Ambiental del centro. En estas reuniones el coordinador explica la mejor manera de realizar su función en sus aulas respectivas. Igualmente los ecodelegados/as podrán transmitir al coordinador y a los reunidos, cualquier tipo de problema planteado o información que pueda servir para aumentar el volumen de residuos correctamente separados.

 

             

 Foto de familia de ecodelegados. De izquierda a derecha Jonatan (1ºB), Valentina (1ºA), Daniela (4ºA), Waffaa (3ºB), Ayoub (2ºB), Laura (1ºBach B), Jonay (2ºA), Lioba (3ºA) y Yonaida (1ºBach A)

 

        

               Rincón del Reciclaje del aula de 3º A

CONCIENCIADOS CON EL MEDIO AMBIENTE

Un curso más y de forma consecutiva el IES Puerto del Carmen participamos de la red de centros sostenibles, REDECOS. El funcionamiento responsable de nuestro centro se fundamenta, no sólo en el máximo ahorro posible de recursos energéticos o de otro tipo y una buena gestión de residuos, sino que esencialmente buscamos ser exportadores de este pensamiento al entorno más próximo por medio de nuestro alumnado, al que intentamos instruir para que desarrolle nuevas pautas de comportamiento y hábitos de vida cotidiana, basados en modelos de conducta sostenible y en el cuidado y  la mejora del medio ambiente.

Un  objetivo principal que nos habíamos propuesto era básicamente el de organizar y poner en marcha un sistema de separación de residuos sencillo y eficaz que involucrara a todos los miembros de la comunidad educativa, desde los profesores hasta los alumnos, pasando por el personal no docente, de manera que cada vez que alguien necesitara deshacerse de un residuo, supiera exactamente lo que tiene que hacer y que hacerlo no le supusiera a esa persona ningún tipo de incomodidad, es decir, que las facilidades para que todos participaran del proyecto fueran máximas. 

Con esta finalidad todas las aulas del centro fueron dotadas de contenedor amarillo para envases y azul para papel y lo mismo ocurre con la zona de Administración y la Sala de Profesores. Los contenedores de estas dos últimas dependencias las vacía el coordinador del proyecto en los contenedores grandes del patio, cuyos residuos son recogidos semanalmente, todos los miércoles por una cuadrilla de jóvenes del Cabildo Insular (Lanzarote Recicla). En las aulas están responsabilizados de esta función los ecodelegados, uno por grupo de alumnos.

Aparte de los contenedores grandes del patio, dos azules y tres amarillos, existen otros dos contenedores más, uno azul y otro amarillo, pero no grandes, sino enormes e idénticos a los de la vía pública, que son vaciados cuando una vez llenos se avisa al departamento correspondiente del Cabildo.

No sólo la gestión de residuos, sino también el ahorro de recursos, principalmente agua, luz y papel han sido tenidos en cuenta en nuestro proyecto por lo que se procura en todo momento que el consumo sea lo más racional posible. Para aprovechar mejor la luz natural se han restablecido y mejorado los sistemas de cierre y apertura de persianas y para minimizar el gasto de agua se han cambiado los grifos originales por pulsadores de cierre automático.

 Somos conscientes de que falta aún mucho por hacer. Mejorar en todos los aspectos del proyecto siempre es posible y en ello estamos.